domingo, 30 de diciembre de 2012

Lecturas del Día Martes, diciembre 18, 2012

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZz1UKFr_n21JnaNRSY5zWc08Q6YxSnoFMm4ucu2tvaLC6V_1vOMNDtRp1EdzGBDBdPjBKbw7nfnG-jAP2DpVp5q4Vr-ZW4YUjf-n4V4S5gJauw7tBgIxVOIcfvVIoNA-dkaiKhj1BeiY/s1600/biblia-y-jesus.jpg
Primera lectura:
Del libro del profeta Jeremías: 23, 5-8
"Miren: Viene un tiempo, dice el Señor, en que haré surgir un renuevo en el tronco de David: será un rey justo y prudente y hará que en la tierra se observen la ley y la justicia.
En sus días será puesto a salvo Judá, Israel habitará confiadamente y a él lo llamarán con este nombre: 'El Señor es nuestra justicia'.
Por eso, miren que vienen tiempos, palabra del Señor, en los que no se dirá: 'Bendito sea el Señor, que sacó a los israelitas de Egipto', sino que se dirá: 'Bendito sea el Señor, que sacó a los hijos de Israel del país del norte y de los demás países donde los había dispersado, y los trajo para que habitaran de nuevo su propia tierra' ".

Salmo responsorial:
Del salmo 71
Ven, Señor, rey de justicia y de paz.
Comunica, Señor, al rey tu juicio, y tu justicia al que es hijo de reyes; así tu siervo saldrá en defensa de tus pobres y regirá a tu pueblo justamente.
Al débil librará del poderoso y ayudará al que se encuentra sin amparo; se apiadará del desvalido y pobre y salvará la vida al desdichado.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, el único que hace grandes cosas. Que su nombre glorioso sea bendito y la tierra se llene de su gloria.

Evangelio:
Del santo Evangelio según san Mateo: 1,18-24
Cristo vino al mundo de la siguiente manera: Estando María, su madre, desposada con José, y antes de que vivieran juntos, sucedió que ella, por obra del Espíritu Santo, estaba esperando un hijo. José, su esposo, que era hombre justo, no queriendo ponerla en evidencia, pensó dejarla en secreto.
Mientras pensaba en estas cosas, un ángel del Señor le dijo en sueños: "José, hijo de David, no dudes en recibir en tu casa a María, tu esposa, porque ella ha concebido por obra del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y tú le pondrás el nombre de Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados".
Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por boca del profeta Isaías: He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, a quien pondrán el nombre de Emmanuel, que quiere decir Dios-con-nosotros.
Cuando José despertó de aquel sueño, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y recibió a su esposa.
 https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCSVutWquxUwdoQuDS4LHuUMmKFQHfMJgwGBaW-qlYM56u13P5TXaNd8nIrLC7z7gqUwJ69C7tnXwDSSiyebVhVLYAL2gAgFASGr6BxEo_qbgu93Y7UUK8j8G-fZVIjPXKQrlrH_yGayI/s1600/Avatar-Palabra-de-Dios-500x364.jpg

1 comentario:

  1. El profeta Jeremías contempló el desmoronamiento de la monarquía. Los últimos reyes de Judá condujeron a la nación a la ruina. Después de la destrucción de Jerusalén, habían sobrevivido algunos cuantos descendientes de la casa de David. El profeta de Anatot juzgaba que la experiencia desastrosa del destierro resultaría medicinal para la casa real de Judá, y que aprendida la lección, Dios restablecería la monarquía y surgirían gobernantes sensatos y prudentes que conducirían al pueblo por la ruta de la justicia. Cuando los profetas cristianos releyeron los orígenes, la vida, pasión y muerte de Jesús retomaron las profecías y no dudaron en identificar a Jesús con el descendiente legítimo de David que había venido a animar a sus hermanos para que reorientaran sus relaciones y restablecieran la armonía perdida. Si en la comunidad de Israel había pobres que sufrían, enfermos marginados de las festividades y momentos gozosos, personas que carecían del alimento cotidiano y del vestido, eso no podía dejar indiferente al resto de Israel. Quienes reconocieran el señorío de Dios, tendrían que reorganizarse para restablecer unas relaciones verdaderamente fraternas entre todos.

    ResponderEliminar